Y para que miento

Y para que le miento al corazón, si aún te sigo queriendo, para que le miento a mis ojos si lo único que desean es poder verte, para que le miento a mis labios si mueren por besar tus dulces labios, no quiero mentirle a mi cuerpo, no quiero decirle que por mis actos perdí a la mujer que iluminaba mi alma, no quiero decirle a mis manos que se perdió la guía de mi vida, como le explico al corazón que perdí lo que tanto lo hacia latir.

Como le explico a mis sueños que a ella no han de encontrarla, porque se ha cerrado el camino a casa, como le explico a la inspiración que la musa se ha desvanecido, como lo explico por favor alguien que me diga como logro explicarle a mi mente, a mi corazón, a mi alma y cada sentido de mi cuerpo que la persona que le daba motivos ha desaparecido.

Mujer porque te fuiste, que hago para tenerte entre mis brazos, ¿acaso solo era un hermoso sueño? No, me niego a creerlo, si eras tan real que mis manos te podían tocar, mis labios besar y mente ilustrar en noches tan largas. Tiempos tan tristes, porque cada día que pasa sin verte es una odisea, porque mi cuerpo pide a gritos tan solo una figura de tu belleza, porque mis ojos se entretienen con un dibujo de tu silueta, porque mis labios aún siguen tan incrédulos, creo que no se dejan engañar porque ya es otro adicto a tus besos.

Eres una cura para este cuerpo enfermo que lo único que desea es poder estrecharte de nuevo, oír tus palabras, oír con agrado un te quiero, un te adoro o un te extraño. Sencillas palabras que hacen que la existencia de un hombre, sea maravillosa.
Porque compartir con el tiempo, con los sueños o con extraños lo que por dentro yo siento, porque no decirte a tu oído lo que para mis adentros es tan sincero, yo no he mentido con lo que siento, yo no he mentido por Dios créelo, me he equivocado como todo ser humano, he metido la pata como cualquier idiota que hace las cosas porque piensa que están bien. He cometido errores, pero quien no los hace cuando esta de pie.

Un Sí dijiste un día, hermosas palabras escuché, felicidad inmensa sentía que a la gente olvide; Un siete recuerda un beso, un diez y ocho una oportunidad, un diez y nueve una tristeza y un ayer la ingenuidad, un veinte y ocho muchas risas, un treinta el dolor, días tan solo días, horas tan largas como quisieran, segundos tan amargos cuando no te veo, y solo fue una intención lo que empeoro.

PERDÓN pronuncian mis poros, mi lengua lo quiere gritar, mi boca con ganas lo espera y mi corazón lo dice con sinceridad, mis sueños lo expresan sin pena, mis oídos esperan con ansias escuchar tu voz pronunciar…

Quiéreme a pesar de los problemas, quiéreme también en la oscuridad, quiéreme en cualquier parte del mundo, no tengas miedo de continuar.

Yo te entrego mis sueños, también por completo mi corazón, poder decirte en la mañana mi vida, poder en la noche perderme en tu voz. No importa decirle a los que escuchan, a los que leen con atención, que un poeta en ti encontró hermosura, inteligencia y dedicación. Amor desbordan tus sentidos, comprensión fue lo que me enamoró, eres valiente cuando otros dudan y sueñas con algo mejor. Repartes tu tiempo como una diosa, eres fuerte como una roca y tan delicada como una flor, tan decidida en tus cosas, que solo Dios sabe los deseos de tu corazón.