Oh si, te veías hermosa, a tu manera claro esta,
Esos burdos comentarios que dice la gente, ni siquiera escuche, te confieso que levantas mucho más que mis pensamientos, mis deseos -te aclaro-.
Te imaginaba tan tierna después de bañar, Te vi en tu overol con una blusa a mitad, Buscando tal vez como escapar de la prisión de tu piel y entregarse a la lujuria del placer, Tus botas no combinan, te vestiré perfecta para mi imaginación, quizás unos tacones altos de un catalogo de mis recuerdos.
Yo se que tu overol no combina, pero estas perfecta para mis deseos, Saboree tu piel, te entregaste a mi sin pensarlo,
Solo recuerdo tu espalda desnuda contra mi pecho, Porque eso de soñar y estar despierto yo lo aplico en el mismo momento.
Tus delicados labios, que murmuran en silencio ser besados, tu mirada tan frágil, que me daba miedo romperte con mi brusco respirar, pero lo olvide, cuando tus uñas se clavaron en mi espalda, aquel desfogue de pasión, deseo y tentación.
Recordé, que debía saborear tu pudor, tu aroma de mujer y romper las reglas de castidad, impuestas por la iglesia...
